Por fin empezamos a ver la luz al final del túnel y ya es posible hacer lo que más anhelábamos: reunirnos con nuestros familiares y amigos.
Pero no podemos bajar la guardia. Es importantísimo ser muy prudentes porque el “bicho” sigue por ahí, y lo que menos queremos es poner en peligro a nuestros seres queridos.
Por eso, en Cuidado del Hogar queremos hacer un recordatorio de las medidas de higiene que debemos seguir antes y después de recibir visitas en nuestra casa.
Cómo limpiar la casa antes de recibir visitas
El primer paso consiste en limpiar todas las superficies de contacto con una mezcla de agua y lejía (recuerda que la proporción recomendada es de 1 parte de lejía por cada 50 de agua). Recomendamos especialmente utilizar una Lejía Perfumada, como Lavender, que dejará tu casa bien perfumada evitando el fuerte olor de la lejía.
Recuerda limpiar mesas, sillas y pomos de puertas y ventanas. Rocía con la mezcla y deja que actúe durante un par de minutos. Posteriormente puedes secarlo con un trapo limpio.
Lo siguiente que deberías desinfectar son los mandos a distancia, y en general cualquier objeto que vayáis a tocar en algún momento durante la reunión: radio, televisión, teléfonos, etc. Para los aparatos electrónicos es mejor utilizar un limpiador hidroalcohólico y dejar que se seque al aire.
Seguidamente, puedes pasar a limpiar el suelo. En función del tipo de suelo que tengas no conviene utilizar lejía: podrías dañarlo. Por ejemplo, los suelos de madera o los pavimentos rústicos como gres, mármol, terracota o pizarra no toleran bien la lejía. En ese caso, es mejor elegir el limpiador específico que utilices habitualmente para tus suelos. En general, su poder higienizante será suficiente para asegurar que tu suelo queda completamente limpio.
Si necesitas algún limpiador para tus suelos, puedes revisar los que tenemos en Cuidado del Hogar:
Limpiador abrillantador para parquet y laminados
Limpiador para suelos de gres y porcelánico
Limpiador Abrillantador para Mármol, granito y terrazo
Limpiador para suelos de barro, mosaico hidráulico, pizarra, gres, cerámica…
Después, asegúrate de que la cocina y el baño están totalmente limpios y desinfectados. Para no alargarnos demasiado, te recomendamos echarle un vistazo a los artículos en los que hablamos de la limpieza de la cocina y la limpieza del baño.
Y por último, si tienes terraza y la vas a utilizar durante la reunión, es importante realizar también una limpieza en profundidad de la misma. Puedes revisar el artículo donde te contamos cómo limpiar la terraza a fondo.
Puede parecer mucho trabajo, pero las reuniones de las próximas semanas serán, posiblemente, las más importantes y esperadas en mucho tiempo, por lo que valdrá la pena saber que estás ofreciendo un entorno totalmente seguro y limpio a las personas que más quieres.
Precauciones a seguir durante la reunión
- A la hora de servir comida, evita que tus comensales utilicen la misma fuente o se vayan pasando la espátula o el cucharón para servirse. Mejor sirve siempre tú y retira los utensilios después de su uso.
- Prepara la casa para poder respetar las distancias de seguridad abriendo las mesas, separando las sillas y apartando muebles u objetos que pudieran entorpecer el paso.
- ¡Ah, y recuerda tener gel hidroalcohólico a mano para que os lo podáis ir aplicando regularmente durante la reunión!
Cómo limpiar la casa después de recibir visitas
Una vez que tus familiares o amigos se hayan ido, no está de más realizar otra limpieza de la casa, especialmente de todo aquello que se haya utilizado durante la velada.
Aunque estés convencido de que nadie de tu entorno está contagiado, es mejor no bajar la guardia.
- Por ello, vuelve a pasar un paño con la mezcla de agua y lejía en todas aquellas superficies que se hayan utilizado, especialmente en las mesas, sillas, pomos de puertas y en el baño.
- Si quieres asegurarte de que tu suelo queda otra vez libre de cualquier agente externo, vuelve a limpiarlo con tu producto habitual. Esto es especialmente importante si tienes niños pequeños.
- Y recuerda limpiar todos los platos, cubiertos y vasos en el lavavajillas o, en caso de que no tengas, con agua bien caliente y abundante jabón.
Siguiendo estos pasos, podréis estar tranquilos de que no solo estáis ofreciendo un lugar seguro a vuestras visitas, sino que cuando se marchan tu casa sigue siendo un entorno totalmente limpio y protegido.
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