En las piscinas domésticas es muy importante tener en cuenta la limpieza del agua y su salubridad. Los propietarios suelen ser los encargados de velar por estos factores, lo que requiere un control permanente y riguroso durante la temporada de baño. Hoy te contaremos cómo acabar con el agua turbia de la piscina y te recomendaremos los productos de limpieza de la piscina que vas a necesitar.
Tener el agua de la piscina limpia garantiza la seguridad de tu familia. Para disfrutar de la piscina con total tranquilidad, te recomendamos que leas detenidamente este artículo.
1. Cómo ajustar el pH de la piscina
El pH es uno de los factores más importantes en el cuidado del agua de tu piscina. Un pH adecuado se sitúa entre 7,2 y 7,6, pero este valor a menudo sufre fluctuaciones.
Es imprescindible comprobar el pH como mínimo una vez por semana, y corregirlo siempre que esté por encima o por debajo del intervalo adecuado. De lo contrario, todas las medidas que tomes posteriormente (cloro, floculante, etc.) no van a ser efectivas. Por lo tanto, el primer paso siempre es ajustar el pH del agua.
Cómo subir el pH de la piscina
Si detectas un pH por debajo de 7,2 significa que el agua es ácida, y eso favorece el desarrollo de algas, además de reducir la capacidad desinfectante del cloro y provocar irritación en ojos y mucosas. Si te encuentras con esta situación, querrás saber cómo subir el pH de la piscina.
Para subir el pH del agua de la piscina necesitas aplicar un Incrementador de pH. Este producto hará que el pH aumente hasta el valor ideal.
Para aumentar un 0,1 el pH se necesitan unos 0,25 litros por cada 10m3 de agua.
Así pues, sabiendo los m3 de tu piscina y las décimas de pH que necesitas aumentar, podrás calcular la cantidad de incrementador que necesitas. Una vez hecho el cálculo, prepara un cubo con 10 litros de agua y diluye en él la cantidad de incrementador necesaria.
Por último, reparte la mezcla por toda la piscina y, pasadas unas horas, comprueba de nuevo el valor del pH.
Cómo bajar el pH de la piscina
Cuando detectas un pH superior a 7,8 es necesario bajarlo, porque por encima de este valor las algas proliferan, la acción desinfectante del Cloro y el Bromo disminuye y provoca irritación de mucosas. Entonces, ¿cómo bajar el pH de la piscina?
Deberás aplicar un Minorador de pH. Para bajar 0,1 unidades de pH necesitarás entre 0,5 y 1,5 litros de minorador para cada 100m3 de agua.
Como ves, es una dosis orientativa, ya que depende en gran medida de las características del agua. Por eso, lo más recomendable es hacer una prueba con una muestra del agua hasta situarse en el valor deseado, y así conocer la dosis exacta para el conjunto del agua.
Precauciones importantes al bajar el pH del agua:
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Debes hacer este paso antes de añadir el cloro. Nunca lo hagas a la vez ni en orden inverso.
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El minorador es un producto ácido. Nunca debes echar agua sobre el ácido, sino al contrario: en un cubo con agua, vas agregando el minorador lentamente y lo vas agitando para que se diluya homogéneamente.
2. Desinfectar el agua de la piscina
El agua de la piscina es un lugar ideal para la proliferación de los microorganismos y gérmenes, donde pueden crecer y reproducirse. Eso no solo afectará a la claridad del agua, sino que puede ser perjudicial para la salud de tu familia.
Por ello, es imprescindible disponer de productos de limpieza para la piscina capaces de desinfectar el agua. Así podrás asegurarte que el agua está en condiciones higiénicas perfectas durante toda la temporada de baño.
Existen muchos productos de limpieza para la piscina. En Cuidado del Hogar tenemos a la venta Hipoclorito Sódico, una solución acuosa de 150 gr. de cloro activo por litro con propiedades desinfectantes, oxidantes, blanqueantes y desodorantes, que es efectivo contra las bacterias, virus y hongos.
Este producto no se vierte directamente en la piscina: el hipoclorito sódico se debe aplicar con una bomba dosificadora que inyecte la dosis justa.
Como existen tantas posibilidades en cuanto a desinfectantes, es posible que tú ya tengas una que te funciona y que conoces perfectamente.
Pero ahora queremos centrarnos en un problema bastante frecuente:
¿Cómo corregir el nivel de cloro o de bromo de la piscina si te pasas con la dosis?
Aunque lo ideal es controlar muy bien las medidas de desinfectante que aplicamos en el agua, a veces ocurre que se nos va un poco la mano. Y tan problemático es el defecto de cloro como el exceso del mismo. No es recomendable que nadie se bañe en la piscina si los niveles de cloro o de bromo son superiores a lo recomendado.
Por eso es importante disponer de un neutralizador Cloro - Bromo, un producto para eliminar el exceso de Cloro o de Bromo, devolviendolo al valor ideal. Así, en poco tiempo podrás volver a disfrutar de la piscina con total seguridad.
Para bajar 1 ppm de cloro residual se necesitan 300 ml de neutralizador por cada 50m3 de agua. Este producto sí se puede verter directamente en el agua.
3. Agua de la piscina turbia: ¿cómo eliminar la turbiedad?
Otro problema frecuente es encontrarse con el agua de la piscina turbia. Cuando esto ocurre, significa que hay partículas suspendidas en el agua y, por supuesto, es necesario eliminarlas.
Para acabar con el agua turbia de la piscina necesitarás un Floculante. Este producto atrapa las partículas que están suspendidas en el agua y las lleva hasta el fondo de la piscina. Así se pueden retirar cómodamente, recuperando de nuevo una piscina de aguas cristalinas y limpias. La dosis es de 2 litros de floculante por cada 100 m3 de agua.
Mira cómo funciona el floculante en este vídeo:
4. Anticalcáreo para el agua de la piscina
Por último, queremos mencionar un producto que te será de gran utilidad, especialmente si el agua de tu piscina tiene mucha cal. Si es así te conviene hacerte con un Anticalcáreo, porque la cal de la piscina no solo se acumula en las paredes sino también en los filtros, reduciendo su vida útil.
Pues bien, el anticalcáreo RC evita que la cal precipite, eliminando las incrustaciones que ya hay y evitando que se formen posteriormente.
La dosis inicial es de 5 litros por cada 100 m3 de agua, y posteriormente, una vez por semana, la dosis de mantenimiento es de 1 litro por cada 100 m3.
Esperamos que este artículo te sea de ayuda para tener una piscina limpia y que la disfrutes todo el verano!
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