El suelo de gres está muy extendido en casas y todo tipo de establecimientos, pero no todos los suelos de gres son iguales: existe el gres común y el gres natural.
El gres común es un material no poroso y por ello su cuidado es más sencillo. Esto hace que lo encontremos muy habitualmente. Además, tiene otra ventaja: resulta algo más económico. En cambio, el gres natural es más poroso y por ello es mucho más delicado, además de ser más caro. Sin embargo, un suelo de gres natural luce muy elegante y sofisticado.
En ambos casos, los pasos a seguir para su limpieza, tratamiento y mantenimiento son bastante similares, excepto el producto que se utiliza para su tratamiento de protección contra las manchas.
Gres natural: cómo tratarlo paso a paso
El gres natural, también llamado de Breda, se consigue seleccionando las mejores arcillas y cociéndolas a alta temperatura. Los tres pasos que debes realizar para tratar el suelo de gres natural son los siguientes:
1. Limpieza del suelo de gres natural
Este primer paso es distinto según si se trata de un suelo de gres de reciente colocación o bien si se trata de un suelo de gres antiguo.
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Si el suelo está recién colocado, probablemente quedarán manchas blanquecinas derivadas de la obra, como restos de cemento y salitres. Para limpiar estos restos y dejar el suelo en perfecto estado recomendamos el Quitacementos Antisalitre Sanet, que se aplica diluido en agua (una parte de Sanet por cada cinco partes de agua) y frotando con un estropajo. Finalmente se aclara con agua limpia, utilizando para ello una fregona o una esponja.
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Si el suelo es antiguo, lo más probable es que hayan manchas domésticas adheridas a él o incluso restos de cera, aplicada en tratamientos anteriores, que ya está estropeada. En ese caso, la limpieza estará enfocada a decapar esos restos de cera y eliminar las manchas. Para ello, el producto más indicado es el Decapante Desengrasante Sanigel, que penetra en los poros del gres y deshace las capas antiguas de cera y las manchas. Para aplicar este producto debes diluirlo en agua y mojar bien el suelo. Espera unos veinte minutos, tiempo en el que el producto irá deshaciendo las capas antiguas y las manchas. Pasado este tiempo deberás frotar el suelo con un estropajo para eliminar completamente los restos de ceras y manchas y, por último, aclarar el suelo con una fregona.
En ambos casos -tanto si usaste Sanet como si usaste Sanigel- debes dejar secar el suelo completamente y no pisarlo mientras esté húmedo para evitar que queden las marcas de las pisadas. El tiempo de secado dependerá de si el suelo está en el interior o en el exterior, de la temperatura y la humedad del ambiente y de su ventilación, pero como mínimo recomendamos que esperes entre 24 y 48 horas.
2. Tratamiento del suelo de gres natural
Una vez que el suelo está bien limpio, puedes pasar a tratarlo. Ten en cuenta que el suelo de gres es poroso y es necesario saturar sus pequeños poros, algo imprescindible para protegerlo contra las manchas domésticas. De lo contrario, las manchas se absorberán fácilmente y eso dificultará mucho la limpieza.
Existe un producto que justamente permite realizar este proceso: saturar los poros del gres natural evitando que aparezcan eflorescencias salinas y protegiéndolo de las manchas domésticas y de las inclemencias del tiempo. Se trata del Protector Antimanchas Bellatrix y existe en dos versiones según el acabado que desees.
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Si deseas un acabado mate natural, sin brillos añadidos, utiliza Bellatrix Natural. Este es el más recomendable para zonas exteriores y también para baños y cocinas, ya que tiene un efecto antideslizante.
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Si deseas un acabado ligeramente más brillante, es decir, un brillo satinado, que le dará a tu suelo una tonalidad más intensa, entonces utiliza Bellatrix Efecto Mojado. Éste se recomienda especialmente para suelos de interior que no vayan a sufrir demasiada humedad pero que, en cambio, vayan a soportar bastante tránsito, por ejemplo recibidores, pasillos o salones, ya que su efecto mojado aporta un extra de protección contra las manchas.
En cualquiera de los casos, la aplicación de Bellatrix es la misma: con una brocha ancha se aplica el producto sin diluir, de forma uniforme y estirando bien el producto.
3. Mantenimiento del suelo de gres natural
Por último hay que tener en cuenta el mantenimiento del suelo de gres natural, es decir, su limpieza cotidiana. No es recomendable utilizar productos que no sean específicos para gres, ya que éstos podrían estropearlo.
Si se trata de un suelo exterior, lo más recomendable es fregar el suelo con Sanet: se diluye un vasito de este producto en el cubo de fregar, con unos 5 litros de agua y se friega el suelo de la forma habitual. De esta manera se eliminará la suciedad y los residuos de cal, reavivando la tonalidad del suelo.
En cambio, si el suelo de gres natural está en el interior, para la limpieza semanal recomendamos utilizar el Limpiador Abrillantador Cerabric, diluyendo un vasito de este producto en un cubo con abundante agua. Al fregar con Cerabric estarás nutriendo el suelo y restaurando el tratamiento realizado en los pasos anteriores.
Gres Común: Cómo tratarlo paso a paso.
El primer paso, es decir, la limpieza inicial, se realiza de forma idéntica al gres natural. Elige entre limpiar el suelo con Sanet o con Sanigel según el tipo de manchas que tenga el suelo.
El segundo paso, es decir, el tratamiento y la protección del suelo, es distinto. Como el gres común no es poroso no será necesario aplicar Bellatrix. Ahora bien, que el suelo no sea poroso no significa que no se manche o que no necesite una protección especial. Para el gres común, en lugar de Bellatrix se debe utilizar el Protector antisuciedad para ceramica, gres y porcelánicos.
Este producto es específico para dar brillo y proteger los suelos que no tienen poro. Una de sus peculiaridades es que no forma película, por lo tanto el paso del tiempo no provoca que se pele o amarillee. Realza la tonalidad natural del suelo y le da un tacto suave no resbaladizo.
Antes de aplicarlo, asegúrate que no hay manchas y que el suelo está totalmente seco. Entonces, vierte el producto sin diluir en un recipiente ancho y, con una brocha, aplica una sola mano muy fina. Durante las siguientes 24 horas es importante no pisar el suelo para evitar que queden marcas. Pasado este tiempo ya se puede transitar con total normalidad.
Para la limpieza semanal utiliza Cerabric, tal como hemos explicado en el caso del gres natural.
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